Cuba y Puerto Rico son
Lola Rodríguez de Tió
de un pájaro las dos alas,
reciben flores o balas
sobre el mismo corazón…
Por lo que leo en el periódico algunos puertorriqueños se suman a la hasta ahora insípida propuesta de la ACC (Autonomía Concertada para Cuba) y entonces han fundado el Movimiento de Reunificación para Puerto Rico y Cuba. En quienes han vivido de espaldas a la historia se dibuja una duda repentina y preguntan: ¿Y eso, se puede hacer? ¿Podrán puertorriqueños, filipinos y cubanos cambiar sus documentos de identidad y recibir pasaporte de la Unión Europea?
La respuesta, en teoría es afirmativa –si la Unión Europea aguanta el tiempo suficiente- Pero esta respuesta, más que una serie de suculencias que se esconden detrás de ella, entraña un problema aún mayor. La idea está sentada en una razón tan vieja como la independencia, algunos creen que la cuenta no da y que solas no pueden desarrollarse las islas del Caribe.
La excusa que pretenden llevar al Palacio de la Paz, en La Haya, es la ilegalidad del Tratado de París, cosa que es cierta, pero no desde el punto de vista que se enuncia; el Tratado es tan ilegal como la posesión de colonias, pero si se asume esta como algo legítimo entonces nada cambia en el documento y asumir este hecho como punto de partida para la autonomía de Cuba y Puerto Rico, no significa un cuerno. Igual pudiera pedirla Alaska, si sus ciudadanos y los de España estuvieran de acuerdo. Así que quienes piden, olvidar el Tratado de París y vayan a las causas y consecuencias del asunto.
El tratado de París de1898
Autonomía Concertada para Cuba , organización no gubernamental fundada en Francia hace unos años, por el escritor Ferran Núñez, no ha cesado de señalar la ilegitimidad del Tratado de París de 1898, por el cual se desposeyó de la nacionalidad española a todos los no nacidos en la península que vivían en Cuba.
Texto del tratado de París
Ver texto del tratado de París, donde en el artículo IX se hace mención de la nacionalidad.
Tildar el Tratado de París como ilegal… la idea no es nueva y de hecho anterior a la independencia. Ya he publicado un artículo acerca de una histórica polémica ocurrida en Cuba, en los años cuarentas. En Puerto Rico ha sido esta una bandera levantada desde que Pedro Albizu Campos, en 1920, se sirvió de ella para justificar la lucha del movimiento revolucionario anticolonial en Puerto Rico. Se ha utilizado también para ilegalizar la utilización de la base Naval de Guantánamo por Estados Unidos.
La autonomía ha estado presente en quienes no se le ha explicado nunca los motivos que llevaron a la guerra, la cual en verdad y a ojos de los libros de texto parece un exceso, ni entienden el valor de la identidad.

La lucha estará entonces entre los que aún confían en sí mismos y quienes olvidan las razones para separarnos de España, las diferencias culturales hoy existentes y no entienden las consecuencias de depender de personas que no tienen nada en común con los gobernados; y quienes optan por lo único que han podido o sabido hacer los gobiernos de las islas: entornar los ojos a ver quién les deja una migaja.
Puerto Rico ha saltado de España a Estados Unidos sin encontrar una verdadera solución. Su caso no es peor que el cubano, que ha ido de España, luego de traicionarse a sí misma, a Estados Unidos, luego a la Unión Soviética y por fin a Venezuela, en un de más a menos que no se sabe dónde va a terminar.
Ley de memoria histórica
Cuba es el tercer país del mundo con más españoles, luego de la propia España y Argentina. La cantidad de cubanos con pasaporte europeo es mayor que la población de La Rioja. Todo gracias a la Ley de Memoria Histórica que permitió a muchos nietos de peninsulares obtener la nacionalidad.
Se ha tratado de hacer de la política un medio de subsistencia. Quienes buscan la autonomía y creen que un puñado de congresistas pueden representar a todo un pueblo en las Cortes de Madrid. Mirar cómo funciona la ONU y ver a quién representa en realidad. Hay otra cosa que parece difícil de entender: la suerte de una nación no la hace la suma de potestades que tengan sus habitantes, asunto más que demostrado en España misma, donde crece el desgano de pertenecer a la Unión Europea.