Unos cinco años después de la caída de las Torres Gemelas de Nueva York vio la luz AE911. Uno de los varios grupos fundados en la teoría de la conspiración. AE911 pretende forzar al congreso norteamericano a aprobar una investigación independiente sobre el atentado al World Trade Center. Para ello han recogido más de 16000 firmas. Unas 18000 de éstas pertenecen a arquitectos e ingenieros.
Tras la casi perfecta caída -lo digo en un sentido físico-del World Trade Center, era de esperar el surgimiento de una organización basada en la teoría de una demolición controlada. Esta organización se llama AE911 (Arquitectos e ingenieros por la verdad del 9/11) y está liderada por el arquitecto de San Francisco Richard Gage.

Según su sitio web el sr. Richard Gage es un profesional con veinte años de experiencia en el diseño y construcción de edificios. Comenzó su cruzada en favor de la verdad dentro de otras agrupaciones fundadas a partir de los hechos de septiembre de 2001. Ha impartido conferencias por todo el mundo y es un personaje conocido en el mundillo de las teorías conspirativas.
Entre otras cosas, los miembros de Arquitectos e ingenieros por la verdad del 9/11 basan su hipótesis en el testimonio de cientos de bomberos que dicen haber escuchado explosiones; en el poco volumen ocupado por los escombros, en los restos humanos que fueron a parar a edificios cercanos; en la caída del WTC 7, no alcanzado por ningún avión y que se cayó en sólo 6. 5 segundos, y las supuestas muestras de Thermite -explosivo para demoliciones de alta calidad- encontrado en varios fragmentos de escombros.
Thermite, el explosivo de la discordia
En abril de 2009, el químico danés Niels H. Harrit, de la Universidad de Copenhague, y otros ocho autores publicaron un artículo en The Open Chemical Physics Journal, titulado «Material termítico activo descubierto en el polvo de la catástrofe del World Trade Center del 11 de septiembre » Se comunicaban los resultados del estudio de cuatro muestras pertenecientes a distintos lugares entre los escombros.
El documento concluye que las astillas de thermite sin reaccionar o como partes de una reacción parcial, parecen estar presentes en muestras del polvo. A pesar de una prueba tan concluyente no se pudo comprobar la custodia de los restos extraídos del siniestro. Las cuatro muestras provenían de donaciones particulares hechas por ciudadanos de Nueva York. El editor en jefe de del Open Chemical Physics Journal dimitió posteriormente.
Aunque AE911 no implica a ninguna organización en particular, se desprende de sus aseveraciones una acusación <<interna>> Lo cierto es que los atentados al World Trade Center han tenido una repercusión inmediata en el arte, la especulación futurista y la vida diaria.
Petición de Arquitectos e Ingenieros por la Verdad del 9/11
En nombre del pueblo de Los Estados Unidos, los abajo firmantes, miembros de Arquitectos e Ingenieros por la Verdad del 9/11 específicamente los hechos relativos a la caída de las Torres Gemelas y el Edificio 7- creemos que hay suficientes vacíos en la versión oficial y por tanto la investigación debe reabrirse e incluir una investigación completa sobre el uso de explosivos que podrían haber sido la causa real de la destrucción de estas instalaciones.
Teoría oficial de la caída de las Torres Gemelas
Los ingenieros que han investigado los hechos generalmente están de acuerdo en que la demolición controlada no es prueba suficiente para comprender la respuesta estructural de los edificios. Si bien la parte superior de una de las torres se inclinó significativamente, en última instancia, no podría haber caído a la calle, argumentan, porque tal inclinación pondría suficiente tensión en el piso inferior, que colapsaría mucho antes y había desplazado suficientemente su centro de gravedad.
También opinan que hay muy poca diferencia entre el colapso progresivo con o sin explosivos en términos de la resistencia que las estructuras podrían proporcionar después de que comenzara el colapso. Las teorías conspirativas tampoco explican el matiz práctico de una demolición controlada. Para derrumbar un edificio se requieren semanas de preparación, incluida la colocación de grandes cantidades de explosivo y el corte de vigas, lo que habría hecho que los edificios del World Trade Center fueran peligrosos e inhabitables. Sin contar que, conspiración al fin, tendría que hacerse sin llamar la atención del miles de personas que trabajaron en el edificio y a día de hoy, técnicos y especialistas que ya algo habrían comentado.
La demolición controlada se realiza tradicionalmente desde la parte inferior de los edificios en lugar de desde la parte superior, aunque hay excepciones según el diseño estructural. Hay poca duda de que el colapso comenzó en lo alto, donde chocó el avión. Además, cualquier explosivo tendría que resistir el impacto de los aviones de pasajeros.
Efectos colaterales de la conspiración
En el año 2013 una joven de 28 años usó un rotulador negro para escribir en la pintura de Eugene Delacroix, La Libertad guiando al pueblo. La obra, que retrata a una mujer con el pecho desnudo a la cabeza de una carga revolucionaria y es considerado una de las mejores obras para simbolizar el espíritu de libertad de los pueblos. La pintura que no sufrió daños permanentes. La mujer escribió «AE911» en la esquina inferior derecha de la pintura antes de ser detenida por un guardia de seguridad y un visitante.